Se ahorraron el costo de las 2.800 máquinas, pero se perdió 25 años de adelanto, modernidad, adecuación administrativa y el capital que representa las fugas del 35 al 40 %, es decir 25 años de pérdidas ¿valió la pena?
En 1992 en Bs. As. Ingresan las máquinas cobradoras y expendedoras de pasajes, el espíritu de esta incorporación fue mejorar la calidad de trabajo de los choferes se le quitaba ese extra de cobrar, cortar boleto y dar vueltos, a los efectos de bajar la cantidad de accidentes, una de las grandes preocupaciones del gobierno de aquel entonces.
En 1993 empezamos hacer el seguimiento de este nuevo sistema y nos pareció totalmente estupendo para incorporarlo al Sistema de Transporte en Paraguay, ésto ayudaría a mejorar el trabajo para el conductor, modernizar la administración y corregir las fugas en la recaudación del dinero.
En 1994 empezamos a trabajar con la revalidación de las monedas en curso, y el Banco Nacional al ver la problemática de las variantes de las monedas decide acuñar las monedas de 500, por lo que en el mismo año ingresamos equipos de MONEBUS para ser probados en campo, también entro otro equipo de la marca Klussendorf.
1995 el entonces Viceministro de transporte de Paraguay Andrés Gonzalez Godziewski, pide información a su par de Argentina.
Re editamos nota del ejemplar de El Mundo del Bus Nº 18 del año 1995.
Como podrán apreciar en el informe, en ese momento estaban en funcionamiento en Bs. As. 10.800 máquinas y la base de información se realizó sobre el último año, con un recorrido de la flota de 747 Millones de Km. Que trasladó 2.050 Millones de Personas con una recaudación de 1.230 Millones de Pesos Arg.
Las Maquinas cobraban y expendían boletos en forma diaria por un total de 5.620.000 unidades lo que arrojaba un valor aproximado 3.370.000 $.
El nivel de falla del sistema era menor que el 2 %, en una flota que en su mayoría trabajaba turnos diurnos y nocturnos, el nivel de falla estaba por debajo de lo previsto por los ingenieros.
Y por lo que más se buscaba que era reducir la cantidad de accidentes, estimaban una reducción de una 30%.
Lo que falto y que todos esperaban, era sobre el porcentaje de reducción de las fugas de capitales en la venta de boletos por parte de los choferes, sobre este punto, al eliminarse los boletos comunes, se eliminó en un 100% la venta de boletos clonados, prácticamente no existen fugas en lo que respecta al servicio de transporte.
Otro dato que recalo El Mundo del Bus, es la reducción del gasto de combustibles y de roturas de las unidades había cambiado las formas de manejo de los conductores.
Vale destacar que en Paraguay se decidió por el sistema de Cobro y Expendio de Pasajes a bordo de las unidades de transporte Nacional, dispuesto por el Decreto Presidencial Nº 7575 del 07/02/95.
A pesar de todo los trabajos realizados y con las maquinas en el país, no se logró implementar el sistema.
En la actualidad hablamos del Billetaje Electrónico, que a pesar que ya cuenta con todos los plazos vencidos, que marca la ley, se homologo el sistema a implementar y se colocaron unos 700 equipos, faltando algo de 2000 equipos más.
Tengamos presentes que trascurrieron 25 años de aquella iniciativa de mejorar el sistema de recaudación y organización administrativa, 25 años de informalidad, 25 años de enfermedad que a muchos los mato, 25 años de malas costumbres y corrupción, 25 años de grandes pérdidas de capitales, en efectivo diario, en repuestos y arreglos, combustible etc.
En todos estos años se perdió calidad, modernidad, cayendo en el atraso y me pregunto ¿a quién le sirvió?
En la actualidad “El Billetaje Electrónico”
Está comprobado que la decisión de postergar no es un acto inteligente, de nada vale hoy andar llorando por los pasillos gubernamentales para seguir dilatando, mientras que estamos pisando los cadáveres de los que quedaron en el camino, se hace obvio que estas formas no pueden existir más, hay que cambiar el criterio, primero reconocer la actividad como “Un servicio público”, incorporar los conceptos de calidad en cada sección de la empresa, aliarse a los conceptos de excelencia en cada trabajo, elegir y formar equipos de tareas, profesionalizar los sistemas mejorando y adecuando la mano de obra, pagar al trabajador lo que corresponda y exigirle excelencia a su tarea, dignificando de esta manera cada oficio y profesión. Esto estimula a querer ser el mejor, creando así el sentimiento de orgullo de ser parte de ese equipo de trabajo y de esa empresa, no se respeta lo que no se quiere.
El sector de urbanos tiene la oportunidad de echar por tierra esos viejos hábitos y empezar la carrera de la evolución, la que nunca se tendría que haber postergado, porque son muchos los defectos a corregir y problemáticas a resolver y el transporte es una actividad vertiginosa que exige una dinámica capaz de cubrir las exigencias de la modernidad, podemos hablar de diferentes formas de servicios pero jamás de servicios ineficaces y de las diferentes formas de joder a la población.
El Billetaje Electrónico es la herramienta precisa que arrojará la información necesaria para ir corrigiendo esos grandes males; males que no son para ser observados por fuera, hay que traerlos a la mesa, eso se llama debatir para crecer no para sumar fracasos, porque esto seduce a la miseria.
Hoy el empresariado tiene que estar abocado a la implementación de estos equipos, conéctese con la realidad querido empresario, conéctese virtualmente a cada caja de recaudación de su empresa, y empiece a ganar lo que tanto perdió, sanear las empresas y prepararlas para los nuevos sistemas que ya están en las puertas del país.