Una vez más pudimos apreciar que en la frontera del lado Argentino en Falcón, se le falta el respeto al ciudadano que viaja.
Martes 14, viajabamos en un micro de línea que tardó más de 4 horas en el trámite aduanero migratorio, origen Terminal de Ómnibus de Asunción con destino a Retiro Buenos Aires, día lluvioso y frío, el bus completo de pasajeros al igual que los demás ómnibus que estaban esperando delante nuestro, recordemos que era fecha de regreso de miles de creyentes que fueron a Paraguay por la visita del Papa Francisco.
Arribamos al paso fronterizo y estuvimos que estar a la espera del lado de Paraguay hasta que nos permitiera cruzar el puente para realizar los trámites aduaneros del lado Argentino del cual la espera se hizo tediosa en ámbas partes. Los pasajeros todos dentro de los buses, recién se bajan cuando se les indica que tienen que bajar con los bolsos y documentos para realizar los trámites de rigor, tiempo atrás esto lo hacían los gendarmes, ahora no están los gendarmes, vimos a uno solo recorriendo, por lo que estas personas llamados “maleteros“, ocuparon un lugar en frontera y a los gritos como si fuesen autoridades, hacen bajar a los pasajeros con la pretensión de organizarlos, recordemos que estos son changarínes, que su función era en los años de respeto, ayudaban a los viajeros a mover las valijas, si se lo solicitaba y lo hacían por una propina, o sea no son empleados de nadie, pero se toman atribuciones como la de dirigirse a la gente preguntando si tienen algún objeto que no esté permitido, ofreciendo los servicios de pasadores, este ejercicio es constante y adelante de las autoridades aduaneras.
Una señora le pregunta a uno de estos sujetos que eran y le responde que son guías…
Vale destacar también que no solo te quieren arrebatar el equipaje para que le des una propina que algunos cobran un precio estipulado y otros tampoco acepta una propina baja, y son los mismos que sacan los equipajes de los pasajeros que están dentro de las unidades de transporte, y los amontonan al lado del bus para que los perros hagan el chequeo, y luego la gente lo pase por el scanner y por último siguen insistiendo para sacarle los bolsos de las mano a las personas y meterlas en el porta equipaje del bus.
Como podemos apreciar en la gráfica, estos “maleteros“ se hacen custodios de los equipajes sin tener ningún tipo de autoridad, violando totalmente la seguridad del equipaje, de los pasajeros y de la unidad de transporte.
Señores del Comité de Frontera este es un tema para darle solución, como también considerar que estas unidade de transporte lleba personas por más de 1.300 Km. y los responsables de llevar a estos pasajeros a buen destino, son dos choferes que tienen una alta responsabilidad, 1.300 Km. de riesgo constante y minimizar los riesgos en ruta también es responsabilidad de las autoridades, por lo que se debe de generar un sistema más ágil, dinámico y respetuoso. Contar con infraestructura que contemple a las personas ante la inclemencia del tiempo.
Los pasajeros de este bus en mención y la tripulación tardamos 5 hora más en llegar, por el puesto fronterizo y los controles en rutas, sin lugar a dudas esto no es otra cosa que una falta de consideración y de respeto al ciudadano.