Claro, muchos dirán, como puede ser si El Mundo del Bus estaba a favor del El Plan Maestro que impulsa el gobierno, y seguimos estando a favor, nos parece extraordinaria la idea de modernizar el sistema, lo que no estamos viendo, es la puesta en valor del proyecto para la concepción del mismo, y se ponga en marcha la proyección de acciones que llegue a tiempo, por lo menos las bases sólidas antes que termine el mandato de esta administración, que no sea cosa que muchos se endeuden y después se cambien las reglas de juego, también me dirán, “Espinosa usted es un bárbaro”, y sí pero, el que se quema con leche, ve la vaca y llora.
Para los que tenemos memoria rescatamos del pasado que en más de una oportunidad, a éste sector se los dejo en banda, abandonado a su suerte y muchas empresas se fundieron y en vez que el estado asista a su socio, los ejecutó sin pena ni gloria, con la triste vista de una enorme cantidad de buses nuevos pudriéndose en un campito, y quien perdió aquí, por favor seguí leyendo.
El pueblo que no pudo usufructuar esos bienes, empresarios que perdieron todo, trabajadores que perdieron sus fuentes de trabajo y el propio gobierno de turno ganó desprestigio por gerenciar proyectos insostenibles en el tiempo, pero no porque sean malos los proyecto, sino por la incapacidad de asistir, de ayudar a fortalecer a las empresas y a los propios inversores.
Ante el eminente desprestigio, la autoridad política tratan de taparlo echándole la culpa al empresariado que son incapaces, es de aquí las campañas en contra de este sector, que dio resultado para cierta parte de la población pero para el mundo técnico, la cosa es diferente, si un gobierno pone en marcha un proyecto y las empresas que apoyan el mismo se funden, genera la idea que el proyecto está plagado de ineficacia, para cualquier gobierno esto es un fracaso, porque puede ahuyentar a inversores, inclusive para otros proyectos comerciales, industriales etc.
En la actualidad es mucho más tétrico, por la difusión de cada detalle que se desparrama por el mundo y puede perjudicar el interés de inversores extranjeros, partiendo del punto que cualquier interesado apuesta a favor y a lo seguro.
Que por más que se puede decir que tal empresario es inepto y por eso se fundió, no deja de manchar la puesta en marcha del proyecto y mucho más si este empresario es un histórico en el sistema, también, lo peor que se puede hacer es poner en comparación a otras empresas exitosas, esto genera suspicacia, y mucho más si éstas son las menos.
Ésta es una de las asignaturas pendientes del Gobierno Paraguayo para que este sector tenga seguridad jurídica en sus inversiones. Que cada gobierno debe de garantizar, y cada gremio debe trabajar en ello para su exigencia.
En la actualidad ya está en marcha la modernidad del sistema de transporte “Plan Maestro”, el año pasado el sector invirtió más de 60 millones de Dólares, en unidades 0Km. con WiFi, aire acondicionado, sistema de cámaras, y rampas para minusválidos entre otras, mientras que el empresariado firmó compromiso con los bancos por estos valores que van al beneficio de la ciudadanía, el gobierno les rebajó el costo del pasaje en dos oportunidades, y nos preguntamos si esto no perjudica a las arcas de las empresas que si o si tienen que pagar esas unidades que está usufructuando el ciudadano, y se hace sugestivo que en estos últimos meses ya hay empresas que comenzaron a flaquear sus finanzas, cediendo parte y otras ya están a la venta, sera que se está repitiendo la historia.
Veamos, hemos escuchado decir a autoridades pasadas que el empresario que no pueda que se valla, acá hay una ley y hay que respetarla, este pensamiento no resiste lógicas, primero porque el gobierno cuenta con las herramientas para fabricar leyes y con este título se presiona al empresariado, es aquí que ponemos el argumento de porque decimos hasta el hartazgo que la modernización no se hace con unidades 0Km. sino que comienza por el concepto, las leyes no deben ser artículo de presión, deben ser un artículo de ORDEN, los empresarios de este rubro son exigidos para la renovación del 10 % de la flota por año, este año tienen que enfrentar el compromiso legal, pero también con los bancos, no pagaron la tercera parte del crédito del año pasado y ahora tienen que sumar las nuevas cuotas, así sucesivamente años posteriores, entonces me pregunto, el pueblo sabe que este sector está ingresando todos los años nuevo capitales para sus servicio, que no deja de ser un patrimonio social, el pueblo sabe que éste es el único sector que el precio de sus servicios lo pone la autoridad de turno y que depende de la buena voluntad política para que el precio del pasaje se respete, el pueblo sabe que el costo del servicio a medida que que se agreguen unidades u otros insumos, el servicio se encarece, y que este costo lo tiene que pagar el usuario, la población sabe que estos empresarios son los garantes de estas deudas y si no pueden cumplir se quedan sin nada, dudo totalmente que se de cuenta, pues salieron los buses 0 Km. y a los pocos días estaban pintados y rotos los polarizados, aquí tenemos otra asignatura pendiente de parte del gremio y de los propios empresarios en la materia de comunicación y concientización.
Es de aquí que las autoridades de otros países que ven que es contraproducente políticamente aumentar el pasaje, subsidian los mismos, a los efectos de estimular las inversiones y darles la seguridad a los empresarios por hacerse cargo de los créditos, por referencia pongo a Argentina que la mayoría de los Paraguayos conoce bien, el pasaje estudiantil, el de los jubilados y otros son subsidiados, porque se considera que los costos en definitiva son del estado por más que los empresarios sean los socios que asumen las deudas, la mayoría de los estados del mundo apoyan al sector con subcidio y logística.
Aplaudimos la iniciativa del gobierno en la modernización y las inversiones en infraestructura, pero si no apoyan y trabajan en conjunto con sus socios, en pos de que el proyecto tome energía propia y se demuestre la sustentabilidad, será inevitable las fracturas y esto se llama FRACASO.