Específicamente en la aduana de Clorinda el paso fronterizo es de terror, con demoras de 6 a 7 horas es verdadera falta de respeto a la gente, que marca categóricamente la ausencia de criterio con alto grado de inconsciencia por parte de las autoridades aduaneras.
Cientos de personas confinadas en el interior de los buses sin poder bajar por al rededor de 6 a 7 horas, un bus que cuenta con un baño en la mayoría de los casos, familias con bebés, niños y ancianos encerrados en un habitáculo sin moverse generando situaciones claustrofóbicas, del cual cada tripulación tienen que liar con los diversos problemas con sus pasajeros, originados claro por la irracional espera, pero aquí no termina ya que al bajar para realizar los trámites aduaneros de rigor, los pasajeros se encuentran con la desagradable atención de maleteros que, si bien se mejoró en algo la situación irregular con los maleteros; su prepotencia, maltrato a los pasajeros y con exigencias de tarifas elevadas para ayudar a las personas en cargar sus equipajes, incluyendo las propuestas de pasar ilegalmente productos como electrodomésticos, electrónica u otras cosas, todo esto a viva voz cuando y a los gritos “hacen bajar” a los pasajeros de cada bus, ejerciendo voz de autoridad que para nada se acerca a serlo, y después de tantas quejas y publicaciones de El Mundo del Bus, el Sr. Intendente de Clorinda tomó la decisión de fiscalizar a cada maletero, y previo registro les entregó una credencial identificatoria, el mal trato bajó bastante a pesar que aún quedan algunas malas costumbres.
Después de soportar la larga espera, los pasajeros bajan de los buses exhaustos y cargados con sus equipajes se encuentran con los agentes de frontera que los recibe con cara de Pitbull con dolor de testículos, pasan por la última prueba de resistencia, presentación de la documentación, pasar por scanner los equipajes y luego a cargar nuevamente los bultos a la unidad que los llevará a destino que queda a más de 1300 Km. Retiro, Bs. As.
Elemento comparativo, cuando cruzamos a Paraguay no hay maleteros, los propios agentes son los que revisan los bultos y el bus, es decir que no cuentan con scanner, mientras este trabajo los pasajeros presentan la documentación pertinente, pasan por las ventanillas Argentina, luego la paraguaya y Policía Nacional de Paraguay, la demora que hay en el vecino país es de 20 a 40 Mn. Y el bus sigue su viaje, nos ha tocado que despacharon un bus en 15 minutos. Hemos tenido viajes promedio Bs. As. A Asunción de 16 Hs. En cambio de Asunción a Bs. As. De 20 a 24 Hs.
Las autoridades Argentina deberán tomar este tema con mayor preocupación, porque generan con las demoras que estamos marcando, un enorme gasto de combustible, por ser que los buses están parados con el motor encendido y funcionando el aire acondicionado, gasto innecesario que incide en el costo de pasaje, tampoco cuentan con la infraestructura para que la gente esté resguardada de los fuertes calores y de las tormentas cuando bajan de las unidades de transporte.
Lo más grave “La fatiga de los conductores”, el desgastes que los conductores tienen en estas larga espera es excesivo, para que después tener que transportar a más de 45 pasajeros por largos 1.300 Km. Esto no es otra cosa que poner en riesgo a miles de pasajeros y a la tripulación de cada transporte, haciendo las rutas argentinas más peligrosas.
Sería necesario y oportuno que el gobierno Argentino contemple este tema con carácter de urgencia, la muestra sería dotar de más personal con experiencia, tecnología e infraestructura, aunque seguimos con la idea que los trámites y controles se deben hacer en las terminales de ómnibus, precintar las bodegas y volver a controlar en su destino al bajar los pasajeros, dándole prioridad de traslado a la unidades que salen precintadas, que si hacen paradas técnicas, estas también se pueden controlar a distancia por la tecnología que hoy contamos.
Esperamos que este tema sea tratado en las reuniones del Sub Grupo 5 de trabajo del MERCOSUR que se reunirán en el mes de Mayo.
