Llego el Papa Francisco a la 15:03 justo en el momento que se intensifica la lluvia, que con toda parsimonia, se para en la puerta abierta del avión mira a la gente con su sonrisa habitual y como si él fuera parte de esa lluvia, sale a descender la escalinata para el encuentro con el Presidente Horacio Cartes, sin importarle la mojadura.
Es aquí que da el primer mensaje de lider, si la gente me viene a ver sin importarle la distancias, el sacrificio y la mojadura de la lluvia, yo no puedo ser menos, también se mojó con esa misma lluvia, porque bien podía haber pedido que lo asistirán con un paraguas, pareciera que tiene todo calculado, pero no es así, él es humildad y sencilles, y le está comprobando al mundo que este es el camino.
Mientras la gente se agolpa en las calles y avenidas para verlo pasar, que al verlo se provocaba una explosión de alegría y emoción hasta las lagrimas, hoy el Papa Francisco inundó Paraguay de fe.